El sol es beneficioso para los niños ya que su participación es importante en la síntesis de la vitamina D, la cuál es utilizada por nuestro organismo para incrementar la concentración de calcio. El sol también estimula la producción de melatonina y serotonina, las conocidas hormonas de la felicidad que favorecen nuestro estado de ánimo.
Pero el sol también tiene sus efectos negativos, si se toma en exceso en un grupo tan vulnerable como los niños, puede ser muy dañino. Los parques infantiles en centros escolares, piscinas o parques públicos requieren de zonas de sombraje para evitar impacto directo de rayos UV sobre los niños.